Puerto Rico, territorio estadounidense en el Caribe, enfrenta una nueva y grave emergencia energética. Este miércoles, más de 1,1 millones de hogares quedaron completamente sin electricidad tras un apagón masivo que dejó a la isla a oscuras y paralizó gran parte de sus servicios esenciales.

La compañía Genera PR, una de las encargadas de operar centrales eléctricas en la isla, comunicó a través de la red social X que la situación fue provocada por una “salida inesperada de todas las plantas de generación”. La caída incluyó tanto a las instalaciones operadas por Genera PR como las de otros generadores privados.

Informamos que hemos experimentado un apagón masivo en toda la Isla debido a la salida inesperada de todas las plantas de generación, incluidas las de Genera PR y los demás generadores privados. Esta situación ha provocado una interrupción significativa en el servicio eléctrico,…

— Genera PR (@Genera_PR) April 16, 2025

Por su parte, Luma Energy, encargada de la distribución del servicio eléctrico, confirmó que “alrededor de 1,1 millones de clientes” fueron afectados. La empresa señaló también que unas horas antes del apagón ya se había reportado un incidente en la red de distribución. “Estamos trabajando para identificar la causa y restablecer el servicio de forma segura”, indicó la compañía.

Una Red Eléctrica en Crisis Permanente

Este nuevo apagón se suma a una larga lista de interrupciones eléctricas que Puerto Rico ha sufrido durante los últimos años, muchas de ellas relacionadas con la frágil infraestructura de su sistema energético.

La situación se ha vuelto crítica desde el devastador paso del huracán María en 2017, que arrasó con gran parte de la red y dejó al país sumido en una prolongada crisis humanitaria y energética.

A pesar de múltiples esfuerzos de reconstrucción y la entrada de operadores privados al sistema, la red eléctrica continúa siendo vulnerable, ineficiente y propensa a fallas catastróficas. Habitualmente se registran cortes parciales o regionales, pero la desconexión completa de todas las plantas de generación —como ocurrió este miércoles— es un evento de alta gravedad.