En una mañana festiva que debería haber estado llena de alegría y celebración, dos turistas adolescentes se convirtieron en víctimas de una pesadilla navideña cuando fueron apuñaladas mientras comían con sus padres en la Terminal Grand Central de Nueva York. El ataque tuvo lugar en el restaurante Tartinery antes de las 11:30 am del lunes, dejando a las víctimas, de 14 y 16 años respectivamente, heridas pero fuera de peligro.

La agresión fue realizada por Steven Hutcherson, un hombre de 36 años proveniente del Bronx, quien aparentemente se había enfrascado en una discusión verbal con el personal del establecimiento momentos antes. Su negativa a cumplir con las reglas del restaurante desencadenó la tragedia, cuando Hutcherson sacó un cuchillo y apuñaló a las dos jóvenes turistas sin motivo aparente.

La rápida actuación de las autoridades fue crucial en este caso, ya que menos de un minuto después del ataque, la policía logró arrestar al agresor. Hutcherson enfrenta cargos graves de intento de asesinato, agresión, posesión de arma y delito menor que pone en peligro el bienestar de un niño.

Las investigaciones han revelado que Hutcherson tenía antecedentes penales, habiendo sido arrestado al menos dos veces en los últimos seis meses, incluso por posesión ilegal de armas. A pesar de estos arrestos previos, fue puesto en libertad condicional y ahora enfrenta consecuencias aún más serias debido a su violento ataque.