El gobierno ultraderechista de Argentina, liderado por el presidente Javier Milei, tomó la decisión de revocar el estatus de refugiado político del expresidente de Bolivia, Evo Morales. Esta medida ha generado fuertes críticas y reavivado las tensiones entre los líderes izquierdistas y derechistas de la región.

El anuncio fue realizado por el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien en un breve mensaje confirmó que «Se ha dado por finalizada la condición de refugiado de Juan Evo Morales Ayma. Fin», sin proporcionar detalles sobre los motivos de esta decisión. Se especula que esta medida estaría alineada a la ideología de rechazo al socialismo que promueve el gobierno de Milei.

Morales, quien gobernó Bolivia por 14 años respaldado por el Movimiento al Socialismo (MAS), llegó a Argentina en diciembre de 2019 luego de renunciar a la presidencia en medio de protestas relacionadas con unas controvertidas elecciones. El gobierno de Alberto Fernández le concedió el estatus de refugiado político, en ese entonces el presidente argentino, pero ahora esta protección le ha sido retirada.

El expresidente boliviano ha sido un crítico de las políticas de ajuste implementadas por Milei y ha mantenido diferencias con él en varios aspectos. Incluso Morales insinuó en alguna ocasión que el líder argentino no completaría su mandato constitucional de cuatro años, lo que desató tensiones entre ambos.

En la actualidad, Morales lidera masivas protestas en Bolivia en contra del presidente Luis Arce, quien fue su sucesor político y aliado. Ambos líderes disputan el control del aparato partidario de cara a las elecciones presidenciales de 2026, lo que ha profundizado las diferencias entre ellos.

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