El asesor de Seguridad Nacional del presidente Donald Trump, Mike Waltz, presentó su renuncia tras una grave filtración de información clasificada. La dimisión ocurre después de que un periodista estadounidense fuera incluido por error en un chat grupal que discutía ataques militares contra los rebeldes hutíes en Yemen.

Según reportes de CBS News, tanto Waltz como su adjunto Alex Wong dejarán sus puestos. Fox News anticipa una pronta declaración oficial del presidente Trump. La Casa Blanca, hasta el momento, no ha ofrecido comentarios públicos sobre esta situación que ha generado preocupación por el manejo de información sensible.

Filtración de planes militares

El periodista involucrado fue Jeffrey Goldberg, jefe de redacción de The Atlantic, quien confirmó haber sido agregado accidentalmente a un grupo de mensajería en Signal. En dicho chat se encontraban altos funcionarios del gobierno, incluyendo el secretario de Defensa, Pete Hegseth, y el propio asesor Mike Waltz.

Goldberg afirmó haber recibido mensajes sobre el plan militar dos días antes de que Trump anunciara oficialmente los ataques, el pasado 15 de marzo. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Brian Hughes, confirmó que el hilo de mensajes parece auténtico y que se investiga cómo ocurrió el error.

Una de las conversaciones filtradas reveló que el vicepresidente J.D. Vance expresó reservas sobre la intervención militar, criticando la aparente dependencia europea de Washington. Vance escribió que «odiaba rescatar a Europa nuevamente», ya que los ataques hutíes afectaban más a naciones europeas que a los intereses directos de Estados Unidos.

Otros participantes, como Waltz y Hegseth, defendieron la operación, argumentando que solo Estados Unidos tenía la capacidad de ejecutar con éxito la misión. Hegseth incluso compartió la «aversión por el aprovechamiento europeo», calificando la situación de «patética», según las capturas de pantalla revisadas por medios.

También participó alguien identificado como “S M”, probablemente Stephen Miller, quien condicionó la operación a obtener beneficios económicos para Estados Unidos. El incidente ha generado un fuerte debate sobre la seguridad digital del gobierno y la idoneidad de los canales utilizados para discutir acciones militares confidenciales.

Expertos en seguridad nacional consideran el hecho como una «falla grave» y exigen medidas urgentes para evitar futuros errores de esta magnitud. Mientras tanto, se espera que Trump emita una declaración para abordar la dimisión de Waltz y la crisis generada por esta delicada filtración interna.

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