El Tribunal Supremo de Brasil ha tomado una decisión histórica al descriminalizar el consumo de marihuana en el país. Esta medida podría tener un gran impacto tanto en la población carcelaria como en la política de drogas de la nación sudamericana. La Corte Suprema formó una mayoría a favor de dejar de considerar delito el porte, cultivo y consumo de cannabis para uso personal.

Después de años de deliberaciones, el juez José Antonio Dias Toffoli expresó su apoyo a la descriminalización, uniéndose a otros cinco jueces que votaron en la misma dirección desde que se iniciaron las discusiones en 2015. Esta mayoría en el tribunal, compuesto por 11 miembros, posiciona a Brasil como uno de los últimos países en Latinoamérica en avanzar hacia la descriminalización de la marihuana para uso personal.

Como resultado de esta decisión, se suspendieron más de 7.700 casos similares que se encontraban ante tribunales menores, a la espera de la resolución definitiva sobre la posesión de marihuana para uso personal. A pesar de la postura intermedia de Toffoli en cuanto a la descriminalización, su voto a favor de la medida refleja un cambio significativo en la política de drogas de Brasil.

Detalles pendientes y la incertidumbre en Brasil

Los jueces aún deben determinar la cantidad exacta de marihuana que se considerará de uso personal, así como la fecha en la que entrará en vigor la legalización. Aunque existe cierta incertidumbre sobre el tiempo que tomará implementar la medida, se espera que el fallo definitivo se emita en breve.

Es importante destacar que, a pesar de la descriminalización, todos los jueces que han votado a favor han enfatizado que la venta de drogas seguirá siendo ilegal en Brasil. La medida se centrará en la posesión de marihuana en cantidades adecuadas para el uso personal, con el objetivo de reducir el número de personas encarceladas por delitos relacionados con las drogas.

En 2006, el Congreso de Brasil aprobó una ley que buscaba penalizar a las personas en posesión de pequeñas cantidades de drogas, incluida la marihuana. Sin embargo, la falta de claridad en la ley ha llevado a la detención de personas que llevaban cantidades mínimas de sustancias ilícitas, acusándolas de tráfico de drogas y contribuyendo al aumento de la población carcelaria en el país.

Expertos como Ilona Szabó, presidenta del Instituto Igarapé, han señalado que muchos de los detenidos por tráfico de drogas en Brasil son infractores de primera vez, capturados en operaciones policiales rutinarias sin pruebas de su vinculación con el crimen organizado. La descriminalización de la marihuana para uso personal podría marcar un cambio significativo en la política de drogas de Brasil y contribuir a la reducción de la población carcelaria del país.

Te puede interesar: Donald Trump podrá hablar sobre testigos en su juicio: Juez levanta parcialmente la orden de censura