Bruselas, Bélgica.- Según el Departamento de Agricultura de Bélgica, más de 750,000 toneladas de papas corren el riesgo de desperdiciarse debido a que los restaurantes, festivales y otros compradores importantes han dejado de abastecerse durante la pandemia mundial del Coronavirus.

Así el gobierno ha presentado una solución para asegurar que estos no se desperdicien: alientar a todos a comer más papas fritas.

Las papas fritas, un bocadillo frito dos veces combinado con mejillones o con mayonesa, se consideran un plato nacional de Bélgica, y muchos bares donde se venden tienen permiso especial para permanecer abiertos. Aunque han estado ofreciendo pedidos de comida para llevar, las ventas han sido bajas pues la mayoría de las personas prefieren no arriesgarse a enfermarse.

Belgapom, la asociación de productores de papa del país, ha comenzado una campaña para alentar a los belgas a comer patatas fritas en casa dos veces por semana, lo que aumentaría drásticamente el consumo de papas en todo el país.

Afortunadamente, Bélgica no se esperanzará de los comensalos. Belgapom, también anunció que donará 25 toneladas de papas a los bancos de alimentos cada semana, según The Brussels Times.

«De esta manera, parte del stock de papa todavía se usará y podemos evitar ver una excelente comida, por la cual nuestros agricultores han trabajado tan duro y se han perdido», dijo al periódico la ministra de agricultura flamenca, Hilde Crevits.

El resto del mundo podría tomar nota de la estrategia belga para combatir el desperdicio de alimentos: las familias necesitadas recibirán productos frescos en un momento en que incluso ir a la tienda de comestibles es un riesgo, y no solo se recomienda comer bocadillos, sino que es muy recomendable .

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