Se estima que el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, realice su último viaje a Corea del Sur antes de que finalice la Administración Biden el próximo mes.

Una fuente diplomática de Seúl dijo, el día 25, que la visita de Blinken, cuya fecha exacta aún está en discusión, probablemente tendrá lugar entre principios y mediados de enero, antes del comienzo de la nueva Administración Trump el 20 de enero.

Un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores de Seúl dijo que el Gobierno está trabajando para concretar una reunión con el canciller coreano Cho Tae Yul durante su visita.

Se espera que Blinken enfatice que la alianza entre Corea del Sur y Estados Unidos sigue firme y exprese su postura sobre la situación actual en Corea del Sur.

Frustran militares el arresto del presidente de Corea del Sur

Policías y agentes anticorrupción sudcoreanos intentaron arrestar este viernes al presidente suspendido Yoon Suk-yeol por tratar de imponer la ley marcial hace un mes, pero abortaron la operación ante la resistencia de los servicios de seguridad en la residencia del político.

Investigadores de la oficina de investigación de la Corrupción para Funcionarios de Alto Rango (CIO), encargada de la causa, ingresaron a una residencia en Seúl donde Yoon ha estado encerrado esta semana a raíz de que la justicia emitió una orden de arresto contra él, pero soldados bajo las órdenes del servicio de seguridad de Yoon se confrontaron con la CIO, expuso un funcionario del Estado Mayor Conjunto.

Los equipos de seguridad de Yoon explicaron que estaban en negociaciones con los investigadores de la oficina anticorrupción que intentan ejecutar la orden de arresto.

En un comunicado, esa oficina consideró que la detención era imposible debido al enfrentamiento en curso y añadió que la preocupación por la seguridad del personal llevó a la decisión de parar la ejecución de la orden judicial.

Desde su encierro, Yoon prometió combatir a las autoridades que buscan detenerlo e interrogarlo por su declaración de ley marcial y por haber enviado al ejército a la asamblea nacional.

Uno de sus abogados, Yoon Kap-keun, insistió en que la orden de arresto es ilegal e inválida y que por tanto su ejecución es ilegítima, por lo que se tomarán acciones legales.