Un bombardeo aéreo del ejército de Israel dejó seis palestinos muertos y 91 heridos en el campo de refugiados de Jenin, en el norte de Cisjordania ocupada, el lunes por la tarde. Los enfrentamientos se produjeron durante una incursión militar para detener a sospechosos buscados, según un comunicado del ejército israelí.

Entre los fallecidos se encuentra Qassam Abu Saria, de 29 años, combatiente de la Yihad Islámica, un grupo islamista que reivindicó la colocación de bombas contra un vehículo blindado israelí que quedó dañado por una explosión de gran potencia. Siete soldados israelíes resultaron heridos en la operación.

El ejército israelí afirmó que disparó dos misiles desde un helicóptero contra hombres armados para ayudar a evacuar a los soldados heridos. Es la primera vez que se utiliza este tipo de arma en Jenin desde 2002, cuando la localidad fue escenario de una sangrienta batalla durante la segunda Intifada.

El ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, prometió usar todos los medios a su disposición para golpear a los elementos terroristas donde se encuentren. Por su parte, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, expresó su preocupación y denunció el uso excesivo de la fuerza y los homicidios ilegales por parte de las fuerzas israelíes en Cisjordania.

Miles de personas participaron en los funerales de los palestinos muertos en Jenin por el  bombardeo, donde se escucharon consignas contra Israel y a favor de la resistencia armada. Desde principios de año, al menos 163 palestinos, 21 israelíes, una ucrania y un italiano han muerto en el contexto del conflicto israelí-palestino.

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