En un intento por combatir la crisis climática y superar sus tensiones geopolíticas, Estados Unidos y China acordaron reanudar un grupo de trabajo sobre cooperación climática y se comprometieron a impulsar las energías renovables. El anuncio fue realizado por ambas partes este miércoles, horas antes de la cumbre de líderes en San Francisco, donde el presidente estadounidense Joe Biden, y el líder chino, Xi Jinping, se sentaron al margen para mantener su primera conversación en un año.

La declaración conjunta, emitida por el Departamento de Estado de EU y el Ministerio de Ecología y Medio Ambiente de China, marca un nuevo capítulo en las relaciones entre ambos países en cuanto a la lucha contra el cambio climático. Además de reanudar el grupo de trabajo bilateral, se acordó un importante aumento en el uso de energías renovables como la eólica, la solar y el almacenamiento en baterías. Estas medidas buscan ayudar a gestionar el sector energético de cada país y sustituir a los combustibles fósiles que contribuyen al calentamiento global.

En un pacto internacional, tanto Estados Unidos como China se comprometieron a reducir en toda su economía las emisiones de gases de efecto invernadero, incluidos el dióxido de carbono, el metano y los hidrofluorocarbonos. Este acuerdo está en línea con el objetivo de mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 1,5 °C, un umbral considerado crucial para evitar los efectos devastadores del cambio climático.

Li Shuo, director del China Climate Hub del Asia Society Policy Institute, afirmó que el compromiso de China de fijar objetivos de liberación para todas las emisiones de gases de efecto invernadero era sin duda el punto más notable de la declaración.»El dióxido de carbono es solo uno de los gases de efecto invernadero. Los gases distintos del dióxido de carbono, como el metano, siguen representando una parte considerable de las emisiones de gases de efecto invernadero de China».

Es importante destacar que esta declaración marca la primera vez que China oficialmente declara su intención de controlar todas las emisiones de gases de efecto invernadero, y no solo las de dióxido de carbono. Expertos en clima en Beijing consideran este anuncio como un paso significativo para combatir la crisis climática y mejorar la relación entre ambos países.

La cumbre Biden-Xi se llevará a cabo en un momento crucial, donde se espera que los líderes aborden temas clave como el cambio climático, la seguridad económica y la estabilidad global. Ambos países tienen el poder de influir de manera significativa en la lucha contra la crisis climática, por lo que este compromiso en aumentar las energías renovables es una señal positiva para todo el mundo.