Noruega.- Las últimas semanas han estado causando mucho revuelo por la cuestión de la aparición de trombos provocadas por la vacuna.

Los casos que han indignado a la población por las apariciones de trombos tras la inoculación han generado mucha polémica, pero gracias a los avances de la investigación, ya se puede facilitar la detección en las personas afectadas.

La clave de esta, se encuentra en una pequeña proteína llamada factor plaquetario 4 (FP4).

En alguno de los casos, el sistema inmunitario genera anticuerpos contra la proteína.

De ahí es donde radica la producción del fenómeno de trombosis.

A pesar de los casos ocurridos en las 16 personas que recibieron las vacunas AstraZeneca en Alemania, Austria y Noruega, no se ha determinado si es lo mismo que ha ocurrido en las seis personas en EE.UU.

Los investigadores señalan que los anticuerpos contra el FP4 se pueden detectar por medio de un examen de diagnóstico que en Europa está al alcance de todos los hospitales.

Si los anticuerpos se detectan a tiempo, se le otorga un tratamiento adecuado para poder disolver los trombos y resolver el problema sin secuelas.

“Al ofrecer un vínculo entre las trombosis y el sistema inmunitario, estos resultados refuerzan la idea de que la vacunación puede haber desencadenado el síndrome”, concluyen los investigadores del hospital Universitario de Oslo (Noruega) en The New England Journal of Medicine .

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