En breve… La campaña electoral para las elecciones presidenciales de 2024 en El Salvador dio inicio este martes, y Nayib Bukele figura como el favorito en las encuestas para buscar la reelección, a pesar de las críticas de sus opositores debido a una prohibición constitucional que impide los mandatos consecutivos en el país.

A profundidad: 

• Más de seis millones de salvadoreños están llamados a las urnas el 4 de febrero del próximo año para elegir al presidente y vicepresidente para el período 2024-2029.
• En 2021, la máxima corte del país, cuyos miembros fueron designados por el Congreso controlado por el oficialismo, determinó que Bukele podía buscar la reelección, aunque al menos cinco artículos de la Constitución lo prohíben.
• Bukele competirá en las elecciones junto a su vicepresidente, Félix Ulloa. Según una reciente encuesta del Centro de Estudios Ciudadanos de la Universidad Francisco Gavidia (CEC), este binomio presidencial del oficialismo cuenta con un apoyo del 68.4%. Sin embargo, aún no han formalizado sus candidaturas, y el plazo para hacerlo vence el 26 de octubre.

¿Qué podemos esperar?

• Según analistas, los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE) podrían perder sus derechos políticos si deciden registrar a Bukele como candidato.
• El artículo 75 de la Constitución establece que aquellos que respalden la reelección o continuidad del presidente de la República, o utilicen métodos directos para ese propósito, perderán su estatus de ciudadano.

Para considerar:

• Bukele, un líder carismático de 42 años, ha ganado popularidad debido a su lucha contra las pandillas, que ha resultado en la liberación de áreas previamente controladas por criminales, a pesar de ser objeto de graves denuncias de violaciones de derechos humanos.
• Por su parte, la oposición llega a las elecciones en una posición debilitada y fragmentada. Hasta ahora, seis partidos opositores han expresado su intención de desafiar al presidente en el poder, incluyendo a la Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que gobernaron el país hasta 2019, cuando Bukele puso fin a 30 años de dominio bipartidista.

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