La Comisión Europea ha rechazado la solicitud de Hungría y Eslovaquia de mediar en un procedimiento de consulta con Ucrania sobre las sanciones impuestas por Kiev al productor de petróleo ruso Lukoil. Un portavoz de la Comisión declaró que, según sus servicios, las consultas urgentes no parecen estar justificadas.

 Seguridad del suministro energético europeo

La Comisión Europea afirma no tener indicios de que las sanciones de Ucrania hayan puesto en riesgo la seguridad de los suministros energéticos europeos. Según el portavoz, el petróleo ruso sigue fluyendo a través del oleoducto Druzhba, que une Rusia, a través de Ucrania, con la República Checa, Eslovaquia y Hungría. Siempre y cuando Lukoil no sea el propietario formal del petróleo, las operaciones de tránsito de crudo a través de Druzhba que llevan a cabo empresas comerciales no se ven afectadas por las sanciones impuestas por Ucrania.

Posición de Hungría y Eslovaquia

Eslovaquia y Hungría, dos países que se oponen a la ayuda militar de los aliados occidentales a Ucrania en su lucha contra la invasión rusa, se han quejado a Bruselas de la medida de Kiev de incluir a Lukoil en su lista de sanciones. Alegan que esto les impide comprar petróleo ruso para sus refinerías, amenazando la seguridad del suministro.

 Análisis de la información adicional por parte de la Comisión

Hungría proporcionó esta semana a la Comisión información adicional sobre el asunto, que ahora analizará. Sin embargo, el portavoz del primer ministro húngaro, Victor Orban, no respondió de inmediato a una petición de comentarios.

En resumen, la Comisión Europea ha rechazado la petición de Hungría y Eslovaquia de mediar en las sanciones impuestas por Ucrania a Lukoil, argumentando que no hay indicios de que dichas sanciones hayan afectado la seguridad del suministro energético europeo. Mientras tanto, Hungría ha proporcionado información adicional a la Comisión, que está en proceso de análisis.