En una operación conjunta entre la Guardia Civil y la policía municipal de Barcelona, se logró desmantelar una red criminal dedicada a la trata de personas con fines de explotación sexual.

Esta red estaba especializada en captar a mujeres en situación de vulnerabilidad en Colombia, prometiéndoles un empleo en España.

La investigación, que comenzó en agosto, permitió la detención de cuatro personas involucradas en la red y la liberación de dos mujeres que eran obligadas a prostituirse bajo amenazas y coacción.

Además, se incautaron importantes sumas de dinero en efectivo y documentos utilizados en la actividad delictiva, como listados de servicios y comunicaciones relacionadas con la captación de las víctimas.

Las víctimas, engañadas con ofertas de trabajo como masajistas, eran trasladadas a España y obligadas a ejercer servicios sexuales para saldar una deuda ficticia impuesta por la organización.

La red criminal mantenía un estricto control sobre las mujeres, obligándolas a residir en el propio local de masajes para asegurar su disponibilidad constante.

Ante esta situación, las víctimas han recibido apoyo por parte de los servicios sociales y entidades colaboradoras, las cuales han implementado un protocolo de asistencia integral para garantizar su recuperación y bienestar.

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