La fiscalía que investiga la fallida ley marcial en Corea del Sur arrestó al exministro de Defensa Nacional, Kim Yong-hyun, señalado como uno de los instigadores de esta medida. Tras una investigación, la Sede de Investigación Especial de la Ley Marcial Especial de la Fiscalía tomó la decisión de detener a Kim Yong-hyun, confiscando incluso su teléfono celular, según reportó la agencia Yonhap.

El exministro, quien se presentó voluntariamente ante las autoridades alrededor de la 1:30 a.m., se sometió a un interrogatorio y declaró estar dispuesto a colaborar activamente con la investigación sobre las sospechas que pesan en su contra.

Esta detención se produce en medio del intenso debate político y social que se vive en el país, luego de que el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, lograra sobrevivir a una moción parlamentaria para destituirlo por la implementación de la ley marcial.

A pesar de la resistencia del Partido del Poder Popular, al que pertenece el mandatario, para evitar su destitución, las presiones para que Yoon renuncie al cargo van en aumento. Incluso, su propio partido ha insinuado que buscarán una «alternativa ordenada» para su salida del poder, tras la caótica situación desatada por la ley marcial.

Esta medida, decretada el pasado martes, sumió al país en una profunda crisis política, generando múltiples protestas y tensiones en las calles. La detención de Kim Yong-hyun, señalado como uno de los responsables de esta ley marcial fallida, es solo uno de los muchos eventos que han marcado esta compleja situación en Corea del Sur.

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