Este miércoles por la tarde, Donald Trump Jr., el hijo del expresidente, está programado para prestar testimonio en un juicio civil por fraude que tiene lugar en Nueva York. Este juicio implica acusaciones de que su padre y las empresas de su familia inflaron el valor de los activos con el propósito de engañar a prestamistas y aseguradoras.

Donald Jr., quien ocupa el cargo de vicepresidente ejecutivo en la Organización Trump y es coacusado en el caso, será el primero de los hijos adultos de Trump en comparecer como testigo. Le seguirán Eric e Ivanka Trump. Por su parte, el expresidente Trump está programado para dar su testimonio el lunes.

Este juicio representa uno de los muchos problemas legales que Trump enfrenta mientras busca regresar a la Casa Blanca. Según las encuestas de opinión, Trump mantiene una considerable ventaja sobre sus competidores en la carrera por la nominación presidencial republicana, con el objetivo de enfrentarse al demócrata Joe Biden en las elecciones de noviembre de 2024.

Además, el hijo mayor de los Trump se enfrenta a cuatro procesos penales independientes, incluyendo casos en Washington y Georgia relacionados con sus intentos de anular su derrota en las elecciones de 2020.

La demanda presentada por la fiscal general demócrata de Nueva York, Letitia James, acusa a Trump, sus dos hijos adultos varones y a varias empresas de su familia de inflar el valor de sus activos en miles de millones de dólares para obtener condiciones de préstamo más favorables.

Trump enfrenta juicios con órdenes de silencio

Por su parte, Trump ha negado haber actuado incorrectamente y ha acusado repetidamente a James y al juez a cargo del caso de tener sesgo político. Aunque se le impuso una orden de silencio limitada que le prohíbe hablar públicamente sobre el personal del tribunal, la ha violado en dos ocasiones y ha recibido una multa de 15 mil dólares por atacar al principal secretario del juez Arthur Engoron, a quien acusa de parcialidad.

El juez en Washington que está a cargo del juicio federal de Trump por subversión electoral también le impuso una restricción en cuanto a lo que puede expresar públicamente. Trump ha argumentado que ambas restricciones afectan su derecho a la libertad de expresión.

En septiembre, antes de que el juicio comenzara, el juez Engoron determinó que Trump había inflado de manera fraudulenta su patrimonio neto y emitió una orden para la disolución de las empresas que controlan los activos principales de su cartera inmobiliaria, incluyendo la Torre Trump de Manhattan. No obstante, esa sentencia se encuentra en espera mientras Trump la apela.

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