En un gigantesco operativo realizado por agentes de la fiscalía ecuatoriana, se detuvo a 29 personas, incluyendo al presidente del Consejo de la Judicatura, jueces, fiscales y policías, todos ellos vinculados a una investigación sobre delincuencia organizada. El objetivo de las autoridades es desmantelar «una estructura criminal incrustada en todos los niveles del Estado y vinculada directamente al narcotráfico», afirmó la fiscal general, Diana Salazar.

La investigación se inició a raíz de la muerte del narcotraficante Leandro Norero, conocido como El Patrón, quien fue asesinado en octubre de 2022 en una cárcel. Norero estaba vinculado al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) según diferentes medios y organizaciones. Bajo su liderazgo, las bandas Los Lobos, Tiguerones, Chone Killers y Latin Kings actuaban como los brazos armados del cártel mexicano.

La muerte de El Patrón desencadenó una violenta masacre carcelaria que duró tres días y dejó más de 30 muertos y más de 60 heridos en octubre del año pasado. La operación Metástasis, como se denominó, realizó 75 allanamientos en seis provincias distintas y se ha considerado como la más grande en la historia del país contra la corrupción y el narcotráfico. En total, participaron más de 900 personas entre fiscales, equipos tácticos y unidades especiales de la policía.

Según informa la prensa local, el celular de Norero confirmó los vínculos entre éste y Wilman Terán, presidente de la Judicatura, así como también con Pablo Ramírez, quien era responsable de administrar las cárceles del país y del organismo antinarcóticos. Ambos han sido arrestados en el marco de esta operación.

Recientemente, las bancadas de los partidos Social Cristiano y Construye, con el respaldo de 40 legisladores, presentaron un pedido formal de juicio político contra Terán, acusándolo de promover una «agenda de impunidad» para los acusados de corrupción.