El ejército libanés afirma estar listo para desplegarse en el sur del país y acusó a Israel de retrasar su retiro, a solo días de la fecha límite establecida por un acuerdo de alto el fuego que entró en vigor el 27 de noviembre.

En un comunicado, el ejército declaró que está «listo para continuar su despliegue tan pronto como el enemigo israelí se retire». Además, hizo un llamado a la población a tener precaución al regresar a las zonas fronterizas del sur, debido a la presencia de minas y objetos sospechosos dejados por Israel.

Según los términos del acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hezbolá, el ejército libanés debe desplegar a sus efectivos en el sur del país junto a cascos azules de la ONU, a medida que las tropas israelíes se retiran en un periodo de 60 días.

Sin embargo, la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció que la retirada de las tropas israelíes continuará más allá de la fecha límite del 26 de enero, alegando que el acuerdo aún no ha sido implementado completamente por Líbano.

La agencia nacional de información libanesa (Ani) reportó que algunas personas desplazadas de las zonas fronterizas han recibido llamadas internacionales, supuestamente emitidas por un portavoz militar israelí, advirtiéndoles de no regresar a sus hogares. Además, se informó sobre operaciones de destrucción de infraestructuras en algunos pueblos fronterizos y bloqueo de entradas para impedir el regreso de los habitantes.

En medio de la tensión, un habitante resultó herido por un disparo israelí en el sur del Líbano, según informaron fuentes locales.

Las autoridades libanesas han instado a Israel a cumplir con el acuerdo de alto el fuego y permitir el despliegue del ejército libanés en el sur del país para garantizar la seguridad de la población y facilitar el retorno de los desplazados. Se espera que las negociaciones entre ambas partes continúen en los próximos días para resolver esta situación delicada en la región.

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