Las autoridades locales en Cancún y el hotel descartaron las acusaciones que un grupo de universitarios estadounidenses hizo al denunciar que los drogaron en un resort de la conocida ciudad turística. Según la información que Rivera Maya News proporcionó, catalogaron esta situación como una probable “noche de borrachera”, ya que los jóvenes experimentaron síntomas de intoxicación alcohólica en lugar de sufrir por algún tipo de droga.

Zara Hull y sus amigos se encontraban en Cancún disfrutando de un viaje de cuatro días cuando su experiencia se vio truncada por lo que ellas consideraron como un intento de drogarlas. Según relatos de los jóvenes, tras beber agua contaminada en el bar de la piscina de un resort, experimentaron malestares y pérdida de conciencia. Las fotografías compartidas por Hull y su familia muestran el momento en el que quedaron inconscientes y fueron trasladados a un hospital local. El novio de Hull, Jake Snider, llevó rápidamente a ambos jóvenes al hospital, donde la situación se volvió aún más complicada. Stephanie Snider, madre de Jake, expresó sus temores en redes sociales, mencionando la posibilidad de tráfico de órganos e incluso la muerte de su hijo. Sin embargo, las autoridades locales han revelado que las pruebas de drogas realizadas a los jóvenes resultaron negativas.