El gran duque Enrique de Luxemburgo sorprendió al mundo al anunciar este martes que abdicará en favor de su hijo primogénito, el príncipe Guillermo, y su esposa la princesa Estefanía de Lannoy, en una ceremonia que se llevará a cabo el próximo 3 de octubre de 2025.

En un emotivo discurso durante las celebraciones navideñas, el gran duque Enrique, de 69 años, compartió la noticia con sus súbditos, expresando que es el momento adecuado para dar un paso atrás y permitir que la nueva generación tome las riendas del Gran Ducado de Luxemburgo.

El proceso de sucesión comenzó en el mes de junio, cuando el gran duque designó a su hijo Guillermo como lugarteniente-representante del país, otorgándole ciertos poderes que antes solo estaban en manos del jefe de Estado.

Esta decisión fue anunciada públicamente durante la fiesta nacional y ahora se confirma que Guillermo y Estefanía serán los nuevos gobernantes a partir de 2025.

Guillermo, de 43 años, es el mayor de los cinco hijos del gran duque Enrique y la gran duquesa María Teresa Mestre.

Está casado con la princesa Estefanía de Lannoy, de origen belga, con quien tiene dos hijos: los príncipes Carlos y Francisco.

La noticia ha generado gran expectativa en Luxemburgo, el único gran ducado que aún existe en el mundo, con una población de cerca de 670 mil habitantes.

Además, se destaca que Luxemburgo tiene una de las mayores rentas per cápita del planeta, lo que lo convierte en un país próspero y con una gran calidad de vida.

Con la abdicación de Enrique y la llegada de Guillermo y Estefanía al trono, se espera una nueva era para el Gran Ducado de Luxemburgo, con una generación más joven al mando y un futuro prometedor para la monarquía.

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