Tras la segunda vuelta de las elecciones legislativas en Francia, que ha favorecido al Nuevo Frente Popular (NFP) con entre 172 y 192 escaños en la Asamblea Nacional, Jean-Luc Mélenchon ha adoptado una postura firme. Exigió al presidente Emmanuel Macron que designe al NFP como el nuevo líder del Gobierno. Además, Mélenchon anunció la implementación inmediata y sin posibilidad de cambios mediante decretos de su plan

«Los resultados de esta votación son claros y contundentes. La derrota del presidente Macron y su coalición es innegable», afirmó Mélenchon. «Es hora de que el presidente acepte esta derrota y tome las medidas correspondientes. El primer ministro actual, Gabriel Attal, debe renunciar, ya que nunca contó con la confianza de

Mélenchon descartó la posibilidad de negociaciones con el partido de Macron, Renacimiento, al que acusó de seguir una política de maltrato social y falta de acción en temas ecológicos durante los últimos siete años. Respecto al plan económico del NFP, Mélenchon aseguró que se implementará sin modificaciones a partir del verano, mediante decretos y sin necesidad de votación parlamentaria.

Plan Económico Inamovible: Cambios prometidos para Francia

Este plan incluye medidas como el adelanto de la edad de jubilación a los 60 años, la congelación de los precios, el incremento del salario mínimo, la organización de conferencias salariales por rama, un plan de gestión del agua y la suspensión de grandes proyectos considerados inútiles.

La gestión económica de Macron ha generado malestar generalizado en el país. El Instituto Nacional de Estadística (INSEE) reportó un déficit público del 5,5% en 2023 y un crecimiento económico del PIB de tan solo el 0,9% el año pasado. A este descontento se suman las protestas de miles de agricultores franceses en enero de 2024, quienes cerraron carreteras en ciudades principales exigiendo mejores condiciones laborales y contrarrestando medidas perjudiciales por

Por otro lado, el Gobierno de Macron enfrenta el desafío de costear los Juegos Olímpicos de París 2024, con una factura de 9 mil millones de euros, y una inversión de 1.500 millones para el ambicioso proyecto de limpieza del río Sena. Este proyecto buscaba restaurar la calidad del agua para permitir competencias en el río, que llevaba décadas prohibido para actividades acuáticas debido a sus niveles de contaminación.

El descontento con la gestión de Macron se ha manifestado de diversas formas en la población, incluyendo campañas virales en redes sociales como #jechiedanslaseinele23juin, que instaba a protestas en el río Sena para expresar desacuerdo con las políticas del Gobierno. A pesar de esto, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y Macron pospusieron su baño en el Sena como demostración de la efectividad de los trabajos de limpieza, lo que generó críticas adicionales y tensiones en el país.

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