En la tarde del 12 de octubre, se confirmó el fallecimiento de Luis Alfredo Garavito a los 66 años. Garavito, mundialmente conocido como uno de los asesinos en serie más despiadados de la historia y el mayor infanticida de Colombia, había sido apodado «La bestia» debido a su extenso historial criminal.

Nacido el 25 de enero de 1957 en Génova, Quindío, su infancia estuvo marcada por la violencia familiar y problemas psiquiátricos, además de su salida forzada de casa debido a su orientación sexual.

El primer incidente delictivo de Garavito se registró cuando tenía 15 años, cuando intentó abusar de un niño, aunque fue detenido y liberado debido a su edad.

A lo largo de los años, Garavito perpetró una serie de violaciones y asesinatos, principalmente dirigidos a niños de 8 a 12 años en varios departamentos de Colombia, así como algunos casos en Ecuador y Venezuela.

Su método solía implicar el engaño de las víctimas en parques y plazas, seguido de golpes, tortura, abuso sexual y asesinato en lugares apartados.

Finalmente, en 1999, «La bestia» fue capturado en Villavicencio, mientras estaba a punto de abusar de otro menor. A raíz de su detención, se le relacionó con la muerte de más de 172 niños.

Garavito confesó haber sido el responsable de 140 asesinatos y dio detalles de sus crímenes, revelando su perturbador placer al cometerlos.

A pesar de la solicitud de extradición de Ecuador, la Corte Suprema de Justicia de Colombia negó su envío a ese país.

Cumplió una condena de 40 años y fue diagnosticado con leucemia antes de su fallecimiento.

Sin embargo, este jueves, se informó que Garavito falleció a la edad de 66 años en un hospital de Valledupar, Colombia, mientras padecía cáncer en un ojo y leucemia.

En el momento de su muerte, cumplía una condena en la prisión de máxima seguridad conocida como La Tramacúa, ubicada en el norte de Colombia.

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