En un fallo histórico, el Tribunal Civil y Administrativo de Queensland ha declarado a la red social X, anteriormente conocida como Twitter y propiedad del magnate Elon Musk, responsable de los contenidos islamofóbicos que se publican en Australia. Este veredicto surge dos años después de que la Red de Defensa de los Derechos de los Musulmanes (AMAN) presentara una denuncia contra la plataforma ante la Comisión de Derechos Humanos de Queensland.

La decisión judicial se basa en la presencia significativa que X tiene en Queensland debido a sus abonados y servicios en este estado del noreste de Australia. Se han identificado 29 contenidos islamofóbicos publicados en un «blog de conspiración antimusulmán de extrema derecha» de un ciudadano estadounidense, los cuales se han propagado a través de X, violando la Ley Antidiscriminación de Queensland.

Victoria legal contra la discriminación en Queensland

AMAN ha celebrado esta decisión como una victoria significativa en la lucha contra la discriminación y el odio en línea. La organización ha señalado que esta victoria legal sentará un precedente para todas las redes sociales que operan en Australia y reitera su compromiso en combatir la islamofobia, especialmente después del ataque supremacista en Christchurch en 2019.

En medio de este fallo, X se encuentra en un pulso legal con la Comisión de Seguridad Electrónica Australiana, luego de que un joven de 16 años apuñalara a un obispo durante una misa en una iglesia asiria en Sídney el pasado 15 de abril. La transmisión en directo de este ataque desencadenó una medida cautelar temporal que exigía a X el bloqueo mundial de las imágenes, la cual fue suspendida este mes por el Tribunal Federal Australiano.

A pesar de la decisión del tribunal en Queensland, X aún tiene la opción de apelar, lo que indica que la batalla legal aún no ha concluido. La plataforma, hasta el momento, no ha hecho declaraciones al respecto. En el horizonte se espera el próximo juicio por la decisión de la red de Musk de no atender la petición inicial de eliminar el contenido gráfico relacionado con el ataque al obispo.

Este fallo destaca la importancia de la responsabilidad que las plataformas en línea tienen con respecto a los contenidos que se comparten en sus redes. La lucha contra la discriminación y el odio en línea sigue siendo un desafío, y decisiones judiciales como este marcan un paso importante en la defensa de los derechos y la protección de las comunidades vulnerables.

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