Un farmacéutico de Wisconsin fue arrestado después de que se supo que un trabajador del hospital echó a perder deliberadamente cientos de dosis de una vacuna COVID-19, según un informe.

Si bien las autoridades no han nombrado al sospechoso, los registros muestran que un farmacéutico con licencia, Steven Brandenburg, de 46 años, fue detenido el jueves en la cárcel del condado de Ozaukee, informó el Milwaukee Journal Sentinel.

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Bradenburg, que parece hosco en su foto policial, fue arrestado por cargos preliminares de daños criminales graves a la propiedad y poner en peligro imprudente la seguridad, pero no está claro si sus cargos se relacionan con las vacunas saboteadas en el Aurora Medical Center.

Sin embargo, la policía había anunciado previamente cargos similares contra un farmacéutico no identificado el jueves y confirmó su arresto en el caso, pero no reveló la identidad del hombre «en espera de una notificación formal de los cargos».

El hospital dijo que despidió al trabajador anónimo el miércoles después de que supuestamente admitió haber retirado intencionalmente 57 viales de la vacuna Moderna del refrigerador del hospital, dejándolos inútiles.

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