Fuerzas policiales ingresan a la residencia del expresidente surcoreano destituido para detenerlo
02/01/2025 - Hace 2 días en InternacionalFuerzas policiales ingresan a la residencia del expresidente surcoreano destituido para detenerlo
Seúl.- La tensión se apoderó de Seúl cuando un grupo de policías y agentes anticorrupción surcoreanos ingresaron al domicilio del presidente suspendido Yoon Suk Yeol en un intento por arrestarlo, a pesar de la presencia de sus seguidores. La situación se tornó aún más compleja cuando una unidad militar bloqueó a las autoridades que accedieron a la residencia, desencadenando un enfrentamiento con el servicio de seguridad del presidente.
Yoon Suk Yeol se encuentra bajo investigación por «rebelión» luego de su polémico intento de imponer la ley marcial en el país el 3 de diciembre. El Parlamento destituyó a Yoon el 14 de diciembre, pero él continúa oficialmente en funciones mientras espera que el Tribunal Constitucional confirme su destitución. Por primera vez en la historia de Corea del Sur, un jefe de Estado en ejercicio enfrenta una orden de arresto.
El dirigente conservador provocó una profunda crisis política al declarar la ley marcial de manera sorpresiva y enviar al ejército a la Asamblea Nacional, decisión que generó fuertes críticas y protestas por parte de la población. A pesar de haber dado marcha atrás en su decisión, Yoon continúa siendo objeto de investigaciones por diversos delitos, incluida la rebelión, que acarrea la pena de muerte.
Policías de Corea del Sur intentan detener al expresidente
Los investigadores surcoreanos han advertido que ejecutarán la orden de detención contra Yoon Suk Yeol dentro del plazo establecido hasta el lunes, luego de ignorar tres citaciones para ser interrogado en el marco de una causa por insurrección. Partidarios y opositores del presidente continúan acampando en las cercanías de su hogar, demostrando una fuerte división en la opinión pública respecto a su accionar.
En medio de esta controversia, Yoon ha prometido luchar rodeado de sus seguidores «hasta el final», argumentando que la República de Corea se encuentra en peligro debido a fuerzas internas y externas que amenazan su soberanía.