Abu Odeida, portavoz de las Brigadas Ezedin al Qassam, expresó en un comunicado transmitido por la televisión Al Aqsa, dirigida por Hamás, que el precio por la liberación de los numerosos rehenes en su poder sería la liberación de todos los prisioneros palestinos en cárceles israelíes.
Señaló que Hamás está dispuesto a abordar esta cuestión ya sea de manera integral o en etapas, según la preferencia del enemigo.
Según las autoridades israelíes, aproximadamente 230 rehenes secuestrados durante el ataque del 7 de octubre se encuentran en la Franja de Gaza, que está bajo el control de Hamás.
Se informa que más de 1,400 personas han perdido la vida en Israel desde el ataque llevado a cabo por comandos de Hamás, mientras que el ministerio de Salud de Hamás ha reportado la muerte de 7,703 personas, en su mayoría civiles, en los bombardeos israelíes, incluyendo más de 3,500 niños.