Moscú.-La Ciudad de Moscú y ciudades de la zona; fueron los primeros lugares en Rusia que hicieron obligatoria la vacunación para empleados del sector servicios; debido al grave aumento de casos.

En consecuencia, el Ministro de Trabajo Ruso dio la orden de que los empleados que se nieguen a vacunarse contra el COVID-19; en las regiones en las que es obligatorio podrán ser despedidos sin sueldo.

Aunque el ministro también aclaró que la suspensión duraría mientras el decreto de vacunación obligatoria sea válido.

Desde que en Moscú se implementó esta orden, otras siete entidades locales, incluidas San Petersburgo y su región, adoptaron medidas similares, según los medios rusos.

Luego de dos días consecutivos de récord de infecciones, Moscú registró un ligero descenso el domingo, con 8 mil 305 casos en 24 horas, una cifra que sigue siendo muy superior a la de hace dos semanas, cuando se registraron unos 3 mil casos diarios.

De acuerdo a las autoridades del lugar este brote se debe a la variante Delta, aparecida en India, y que afecta a casi el 90% de los nuevos pacientes, según el alcalde Serguéi Sobianin.

El número de nuevos casos en San Petersburgo superó los mil en 24 horas por primera vez desde finales de febrero. Y a nivel nacional, el país registró 17 mil 611 nuevos casos.

El brote se vio favorecido por una campaña de vacunación lenta por la desconfianza de los rusos, la ausencia de restricciones desde hace meses y el incumplimiento de las normas de distanciamiento y de uso de cubrebocas.

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