La huelga de 24 horas convocada por grupos populares de la República Dominicana en protesta por el elevado costo de la vida mantiene parcialmente paralizado el norte del país. La medida afecta especialmente a escuelas y el transporte colectivo, en una jornada que busca llamar la atención sobre las políticas económicas del Gobierno y el alto costo de la vida.

La coalición de Grupos Populares y Sociales de la región del Cibao, que reúne a decenas de organizaciones, es la responsable de convocar esta huelga. El portavoz de la coalición, Osvaldo Brito, afirmó que el apoyo de la población es «contundente» a pesar de la intimidación por parte del Gobierno.

La demanda de la coalición incluye la rebaja del precio de la canasta básica y los combustibles, así como mejoras en los servicios de salud y en el suministro eléctrico. Brito insta a la población a respaldar este llamado, quedándose en sus hogares y enviando un mensaje claro al Gobierno de que debe hacer cambios.

La convocatoria genera diferentes reacciones en la sociedad dominicana. Por un lado, los comerciantes rechazan la protesta, argumentando que trastorna las actividades en la zona. El presidente de Detallistas Unidos, Ricardo Rosario, llamó a todas las partes a volver a la mesa de negociaciones y trabajar juntas para encontrar soluciones constructivas.

Durante la jornada de huelga, se reportan quemas de neumáticos en algunos sectores como Los Ciruelitos, Licey Al Medio y Navarrete, provocando preocupación en la región. Además, medios locales informan que la ciudad de Santiago de los Caballeros se encuentra militarizada.

Esta no es la primera vez que la coalición de Grupos Populares y Sociales convoca a un paro similar. En abril pasado, también realizaron una huelga con las mismas demandas. Ahora, buscan nuevamente llamar la atención del Gobierno y exigir cambios en la política económica que afecta a la gran mayoría de la población.