Lisboa.- La Iglesia católica de Portugal ha tomado la decisión de indemnizar a las víctimas de violencia sexual que han sufrido abusos dentro de la institución, y lo hará de forma proporcional a la gravedad de los hechos. Esta medida surge tras la publicación de un informe que reveló la agresión de al menos 4.815 menores por eclesiásticos desde 1950.

En el comunicado emitido por la conferencia episcopal portuguesa, se destaca que las indemnizaciones no serán únicamente simbólicas, sino que se buscará que sean justas y proporcionales al daño causado a las víctimas. La compensación económica, según el comunicado, no busca borrar lo irreparable, pero sí se espera que sea una forma de reparación justa.

Las diócesis del país financiarán solidariamente un fondo para que los afectados presenten sus solicitudes de indemnización antes de finales de diciembre de 2024. A pesar de que muchas de las víctimas ya han fallecido, se espera que se pueda hacer justicia y brindarles una compensación a sus familiares.

Portugal se ha visto afectado por escándalos de abusos eclesiásticos en los últimos años, lo que ha llevado a la Iglesia a tomar medidas para cambiar su cultura y prevenir futuros casos de violencia sexual. Durante una visita a Lisboa en agosto pasado, el papa Francisco se reunió con 13 víctimas de pederastia, mostrando su apoyo a aquellos que han sufrido abusos.

El informe encargado el año pasado por la Iglesia, pero realizado por expertos independientes, evidenció que la jerarquía eclesiástica había encubierto la violencia sexual de forma sistemática. Este informe recopiló más de 500 testimonios en un país donde la mayoría de la población se identifica como católica.

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