Tel Aviv.- Israel ha lanzado una serie de violentos bombardeos el domingo contra objetivos pertenecientes al movimiento libanés proiraní Hezbolá, en el sur de Beirut. Estos ataques se producen en la víspera del primer aniversario del ataque de Hamas en suelo israelí que desencadenó la guerra en Gaza.

Después de debilitar a Hamas durante una devastadora ofensiva en Gaza, Israel anunció a mediados de septiembre un cambio estratégico hacia el norte, en la frontera libanesa, donde Hezbolá abrió un frente contra Israel en apoyo a Hamas el 8 de octubre de 2023.

El ejército israelí afirmó haber «rodeado» la zona de Jabaliya, en el norte de la Franja de Gaza, donde se estima que Hamas está reforzando sus fuerzas. Estos enfrentamientos han dejado un saldo de 17 muertos y múltiples heridos, incluyendo a nueve niños.

En una noche de terror, el suburbio sur de Beirut fue blanco de más de 30 bombardeos, según la agencia de prensa oficial libanesa ANI. La población vivió momentos de extrema angustia, con una seguidilla de explosiones que sacudieron la zona y parecían un terremoto, según testigos.

El primer ministro libanés, Najib Mikati, ha pedido al mundo que presione a Israel en favor de un alto el fuego. Incluso el papa Francisco ha hecho un llamamiento por la paz y ha pedido una tregua inmediata en todos los frentes, incluido el libanés.

Por su parte, Hezbolá ha respondido a los bombardeos israelíes atacando una unidad del ejército israelí con obuses en el sur de Líbano. También se ha informado de ataques con cohetes y drones contra bases militares en el norte de Israel.

El conflicto en Medio Oriente ha causado estragos en la región, con miles de muertos y millones de desplazados. La comunidad internacional observa con preocupación la escalada de violencia y la falta de perspectivas de una solución pacífica.

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