El módulo Moon Sniper de Japón se prepara para iniciar el descenso hacia la Luna en un intento de lograr un aterrizaje controlado, lo que podría convertir al país en el quinto en lograr esta hazaña tras Estados Unidos, la Unión Soviética, China e India.

La misión Smart Lander for Investigating Moon (SLIM) tiene como objetivo un aterrizaje preciso utilizando una sonda rodante desarrollada por una empresa de juguetes.

Apodado Moon Sniper por la agencia espacial JAXA, el descenso está programado para la medianoche del viernes al sábado en Japón, con un aterrizaje previsto 20 minutos después.

Este enfoque de «francotirador» busca colocar la nave a solo cien metros de un punto de referencia en la Luna, un margen significativamente más estrecho que las áreas de aterrizaje convencionales.

El éxito de la misión no solo marcaría un hito para Japón, sino que también rompería la mala racha del sector aeroespacial japonés, que ha experimentado dos misiones lunares y varios lanzamientos de cohetes fallidos.

La complejidad tecnológica de esta misión, con un objetivo de aterrizaje en un cráter lunar poco explorado, presenta desafíos significativos, pero el éxito proporcionaría información clave sobre el origen de la Luna y la posible presencia de agua en el satélite.

La sonda Moon Sniper, desarrollada por JAXA y una empresa de juguetes, enfrenta una tarea excepcionalmente compleja, ya que intentará abordar terrenos rocosos e irregulares, marcando un avance tecnológico significativo que podría respaldar futuras misiones de investigación lunar y la eventual construcción de bases lunares.

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