En breve… La jueza Tanya Chutkan emitió una orden de restricción de expresión limitada en contra del expresidente Donald Trump, la cual le prohíbe hacer declaraciones públicas en las que ataque a los fiscales, testigos y al personal del tribunal en el caso de interferencia electoral en las elecciones presidenciales de 2020 que se está llevando a cabo en Washington.

A detalle:

• Chutkan delineó los aspectos generales de esta orden después de una audiencia que duró un poco más de dos horas, en la cual se discutió el equilibrio entre la libertad de expresión y la necesidad de evitar que Trump influencie al jurado o a los testigos con sus descalificaciones y ataques.
• Esta situación es inusual en la historia de Estados Unidos, ya que Trump busca la elección presidencial mientras enfrenta acusaciones en 91 delitos en cuatro casos penales diferentes.
• Por lo que con las medidas dictadas, Trump aún puede criticar al presidente Joe Biden y al Departamento de Justicia, alegando que está siendo objeto de una «caza de brujas» con motivaciones políticas. También puede continuar denigrando, como lo ha hecho anteriormente, a la ciudad de Washington, que es la jurisdicción donde se lleva a cabo el caso. Sin embargo, no tiene permitido dirigir descalificaciones, insultos ni amenazas contra los testigos, los fiscales que lo acusan ni el personal del tribunal.
• Adicionalmente, la jueza destacó que muchos de los ataques de Trump han estado dirigidos hacia funcionarios públicos que simplemente están cumpliendo con sus deberes. Mencionó ejemplos, como el calificar de «matón» al fiscal especial que lo está investigando, Jack Smith.
• Al anunciar su decisión, señaló que Trump no tiene permitido llevar a cabo una «campaña de desprestigio» contra los fiscales y el personal del tribunal. Su preocupación no radica en si le agrada o no el lenguaje que emplea Trump, sino en el lenguaje que representa una amenaza para la administración de justicia.

Mientras tanto: 

• La jueza no ha especificado cómo hará cumplir su decisión, sin embargo, indicó que tomará esa determinación en el futuro si Trump no acata la orden.
• Esta decisión surge después de que en el caso de fraude civil de Trump en Nueva York, el juez impusiera una orden de silencio más limitada que prohíbe ataques personales contra el personal del tribunal después de que Trump publicara en redes sociales comentarios difamatorios sobre la principal asesora del juez.
• En el caso de Washington, la jueza Chutkan ya había establecido restricciones menores que Trump las aceptó cuando se le concedió la libertad condicional.

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