Tel Aviv.- Este viernes, el ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, aprobó la emisión de 7.000 órdenes de reclutamiento dirigidas a judíos ultraortodoxos, una decisión que continuará la política que su predecesor, Yoav Gallant, inició antes de ser destituido a principios de noviembre. Las comunidades haredíes han protestado intensamente por la medida, que comenzará con la entrega de 1.000 notificaciones este domingo, mientras que el resto de las órdenes se distribuirán de manera escalonada en los próximos meses.

A pesar de la oposición de los líderes religiosos y políticos haredíes, Katz ha enfatizado que busca mantener un «diálogo exhaustivo» con todas las partes involucradas para avanzar hacia una solución pactada que permita integrar a los ultraortodoxos en el Ejército israelí. El ministro también ha asegurado que las fuerzas armadas trabajarán para proporcionar el apoyo necesario a estos nuevos reclutas, garantizando que puedan cumplir con sus tareas militares sin comprometer su estilo de vida religioso, según recoge The Times of Israel.

La cuestión del reclutamiento de los ultraortodoxos es un tema polémico durante décadas en Israel. Los haredíes, en su mayoría estudiantes de las yeshivas, se oponen firmemente a cualquier intento de reclutamiento, citando su dedicación a los estudios religiosos.

Los socios de coalición ultraortodoxos del primer ministro Benjamin Netanyahu han presionado al gobierno para aprobar una ley que permita mantener las exenciones para los estudiantes de las escuelas religiosas. En respuesta a la decisión de Katz, líderes de los partidos haredíes, como Judaísmo Unido de la Torá y Shas, han salido a protestar en las calles, acusando al Likud de declarar una «guerra» a los ultraortodoxos.

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