La Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) de Guatemala realizó este martes un allanamiento en la sede del Tribunal Supremo Electoral (TSE), en el marco de una investigación por supuestas irregularidades en el proceso electoral del pasado 25 de junio, cuando se eligió al presidente Bernardo Arévalo de León, del partido Movimiento Semilla.

Por primera vez, los fiscales abrieron varias cajas que contenían boletas electorales de la primera vuelta, pese a la oposición del TSE, que consideró ilegal dicha acción y argumentó que solo le corresponde a dicho órgano y a los tribunales electorales la revisión de los votos, según lo establece la ley.

La FECI solicitó abrir 160 cajas específicas que incluían los votos emitidos para la presidencia, diputaciones y alcaldías municipales, según detalló el TSE en un comunicado. El jefe de comunicación del TSE, Luis Gerardo Ramírez, declaró a los medios que esta diligencia se estaba llevando “bajo estricta responsabilidad del Ministerio Público” .

El fiscal Rafael Curruchiche, quien dirige el operativo, dijo que se trata de una investigación por “delitos electorales” y que se busca “obtener indicios que fortalezcan la investigación” . Sin embargo, no dio más detalles sobre el caso ni sobre las personas involucradas.

Este es el tercer allanamiento que realiza la Fiscalía  al TSE desde el 12 de julio, cuando inició una pesquisa contra el Movimiento Semilla por presuntamente haber inscrito a más de 5.000 ciudadanos de forma ilegal mediante falsificación de documentos. Incluso, según las autoridades, el partido político habría registrado como militantes a al menos 12 personas fallecidas.

El 13 de julio, la FECI también allanó el despacho del Registro de Ciudadanos del TSE en busca de documentos relacionados con la inscripción de Semilla como organización con fines políticos. El 20 de julio, la Fiscalía volvió a allanar las oficinas de Recursos Humanos del TSE para obtener el expediente laboral de Eleonora Castillo, subdirectora del Registro de Ciudadanos .

Estas acciones han generado críticas y cuestionamientos por parte de diversos sectores, que ven en ellas un intento de socavar la legitimidad del presidente electo Arévalo y su partido. El propio Arévalo ha denunciado un “golpe de Estado en curso” y ha acusado a la fiscal general Consuelo Porras, sancionada por Estados Unidos por corrupción, de estar detrás de una “persecución política” .

Arévalo ganó la segunda vuelta electoral el pasado 20 de agosto con el 58 % de los votos frente a la candidata Sandra Torres, del partido Unidad Nacional de la Esperanza. Su triunfo fue avalado por el TSE y reconocido por la comunidad internacional. Sin embargo, su asunción al poder está prevista para el próximo 14 de enero de 2024, lo que genera incertidumbre sobre el futuro político del país .

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