La Guerra de Gaza ha cobrado la vida de 50 periodistas, según el recuento realizado por el Comité de Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés). Esta cifra representa un trágico balance en apenas seis semanas de conflicto, siendo la mayoría de las víctimas (45) periodistas palestinos.

El CPJ también informó sobre la muerte reciente de Alaa Taher Al-Hassanat, periodista y presentador de Al Majedat Media Network. Al-Hassanat falleció junto a varios miembros de su familia en un bombardeo israelí que impactó directamente sobre su domicilio, según testimonios coincidentes de tres medios distintos.

Este caso se suma a otros informadores que, aunque no estaban en el ejercicio de su trabajo, fueron alcanzados por bombas en sus propias viviendas situadas en barrios civiles. Estos trágicos sucesos generan una gran preocupación en la comunidad periodística.

El pasado 27 de octubre, un portavoz del Ejército israelí comunicó a las agencias Reuters y France Presse que no podían garantizar la seguridad de sus periodistas que trabajan en la Franja de Gaza, a pesar de las solicitudes de inmunidad profesional. Y diez días después, el Gobierno israelí acusó a algunos periodistas de complicidad en los crímenes cometidos por Hamás durante un ataque sorpresa contra Israel el 7 de octubre, argumentando que tenían conocimiento previo y habían filmado y documentado parte de aquellos ataques.

En respuesta a estas acusaciones, la oficina de prensa del Gobierno cuestionó a medios como AP, Reuters, CNN y The New York Times, exigiendo explicaciones por el hecho de que sus periodistas supuestamente habían «filmado el asesinato de civiles, el abuso de cadáveres y el secuestro de hombres y mujeres», acciones que consideraron «cruzar todas las líneas rojas, tanto profesionales como morales».

El CPJ ha documentando cada uno de los periodistas caídos en este conflicto y aprovechó su gala anual de entrega de premios por la libertad de prensa para destacar las difíciles condiciones en las que los periodistas cubren la guerra de Gaza. Estos profesionales se encuentran trabajando en medio de una situación lamentable, con escasos suministros y entre constantes amenazas de bombas.

En la ceremonia, el presentador de CNN, Omar Jiménez, rindió homenaje a estos valientes informadores, afirmando que «a pesar de la difícil situación, los periodistas permanecen allí porque saben que son la única vía para conocer lo que está sucediendo en el mundo». Hasta el momento, el Gobierno israelí ha restringido el acceso de periodistas a Gaza, lo cual dificulta la cobertura imparcial del conflicto.