La presidencia francesa aseguró este viernes que los comentarios atribuidos al presidente Emmanuel Macron en una serie de artículos del diario de referencia Le Monde son falsos, después de que varios diputados de izquierda los consideraran «racistas».

En una investigación consagrada al presidente, de la que se publicaron hasta el jueves dos de sus cuatro partes, Macron habría dicho en 2023 a su entonces ministro de Salud que «el problema de las urgencias en el país es que están llenas de Mamadou», un nombre muy habitual en el oeste de África.

«El Elíseo desmiente firmemente estas declaraciones, que no han sido contrastadas con la presidencia antes de su publicación», reaccionó el viernes el entorno del presidente, cuya popularidad está en mínimos desde su llegada al poder en 2017.

En plena crisis política desatada por Macron en junio con el inesperado adelanto electoral de los comicios legislativos de 2027 y que ya provocó la caída de su primer ministro conservador Michel Barnier, las críticas no tardaron en llegar.

«Estas declaraciones racistas del presidente (…) son un insulto [para el país], una absoluta vergüenza. Estoy deseando que se vaya», escribió en la red social X el líder del partido de izquierda radical La Francia Insumisa (LFI), Manuel Bompard.

Pero no son las únicas declaraciones controvertidas atribuidas al presidente.

Según el diario, la presidencia bautizó con un mote homófobo la sede del primer ministro, cuando ejercía el cargo Gabriel Attal, abiertamente homosexual y de su propio partido.

Y en otro pasaje, los periodistas de Le Monde escriben que el jefe de Estado centroderechista calificó a la líder ecologista, Marine Tondelier, y a la candidata de la izquierda a primera ministra, Lucie Castets, con la palabra sexista «cocotte».

«Todo vale: racismo, homofobia, sexismo. Todo encerrado en un palacio dorado, lejos de la mirada de los franceses, a los que sermonea todo el día», criticó el diputado de izquierda François Ruffin.

El jueces, Macron también enfrentaba otras críticas por unos comentarios ante las cámaras durante una tensa visita a Mayotte, archipiélago francés en el océano Índico devastado el sábado por el ciclón Chido.

«Ustedes están contentos de estar en Francia, porque si [Mayotte] no fuera Francia, estarían 10.000 veces más en la mierda», dijo el presidente ante una muchedumbre enfadada. Su mandato termina en 2027 y no puede optar a la reelección.