El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, advirtió este miércoles que los países de la alianza militar deben invertir «mucho más» en Defensa, haciéndose eco del mismo pedido del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Para Rutte, los países de la OTAN, especialmente los europeos, «necesitamos hacer mucho más, para tener lo necesario para disuadir y defender, y para que sea más equitativo compartir la carga».

Para el exprimer ministro neerlandés, los países de la OTAN están «en el camino correcto», ya que en 2024 los europeos y canadienses «invirtieron 485.000 millones de dólares en defensa, un aumento de casi el 20% en comparación con 2023».

Rutte conducirá este miércoles un encuentro de la coalición internacional de apoyo a Ucrania, y el jueves una reunión de ministros de Defensa de los países de la OTAN, con la presencia del nuevo secretario estadounidense, Pete Hegseth.

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Luego de la invasión de Rusia al territorio de Ucrania, en 2022, los países de la OTAN transformaron el objetivo de invertir en defensa el 2% de sus respectivos PIB en un piso mínimo, de «por lo menos» ese nivel.

Sin embargo, desde la campaña electoral en Estados Unidos, Trump presiona a los países de la alianza militar a llevar esos gastos militares a un 5%.

Para reforzar esa presión, Trump ha generado evidente suspenso sobre la continuidad de la ayuda de EEUU a Ucrania, un tema de extrema sensibilidad para los europeos.

En ese cuadro, los europeos tienen que decidir entre desarrollar su propia industria de defensa o comprar más armas fuera del bloque, en particular a Estados Unidos.

La decisión ha sido en favor de la primera opción, pero esa modernización y ampliación de la industria europea de defensa tomará tiempo e inversiones gigantescas.

Simultáneamente, Trump presiona a Ucrania para aceptar una negociación con Rusia para poner fin al conflicto armado, pero los europeos buscan evitar que tal negociación incluya la cesión de territorios.