Caracas.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, tachó al empresario sudafricano Elon Musk y al presidente de Argentina, Javier Milei, de pertenecer a círculos diabólicos y sectas satánicas. Estas afirmaciones generaron una fuerte controversia entre ambas partes, con el argentino asegurando «tener fe en Dios» y rechazando las acusaciones del mandatario venezolano.

La polémica se desató cuando Maduro señaló durante un acto con la Guardia Nacional Bolivariana que Musk y Milei formaban parte de sectas satánicas vinculadas al poder estadounidense y al fascismo. En sus palabras, Maduro destacó los supuestos símbolos diabólicos presentes en el empresario sudafricano y en el argentino, alimentando así la tensión entre ambos líderes.

En respuesta a estas acusaciones, Milei publicó en sus redes sociales un mensaje en el que reafirmó su fe en Dios y defendió sus valores y creencias. «La victoria en el combate no depende de la cantidad de soldados, sino de la fuerza que viene del cielo. El comunismo es ateo, nosotros tenemos fe en Dios. ¡VIVA LA LIBERTAD CARAJO!», expresó el presidente argentino.

Por su parte, Musk no se ha pronunciado directamente sobre las acusaciones de Maduro, pero su historial en redes sociales refleja una postura crítica hacia el gobierno venezolano y sus políticas. Este intercambio de palabras entre los líderes de Argentina y Venezuela ha generado un debate en torno a la libertad de expresión, las creencias espirituales y la confrontación ideológica en la región.

La confrontación entre Maduro y Milei no es nueva, ya que en el pasado ambos líderes han intercambiado críticas y desacuerdos en temas políticos y sociales. Milei, que fue educado como católico pero ha volcado su práctica espiritual hacia el judaísmo, ha mantenido una postura alineada con Estados Unidos e Israel, lo que ha generado tensiones con el gobierno venezolano.

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