Desde el inicio de la guerra el pasado 7 de octubre, la Franja de Gaza ha sido escenario de una devastadora cifra de muertes, con un total de 29,092 personas fallecidas en ataques israelíes, según informa el Ministerio de Sanidad controlado por Hamás.

En las últimas 24 horas, se registraron 107 nuevas víctimas mortales y 145 heridos, elevando el total de heridos a 69,028 a lo largo de 136 días de conflicto. Además, se estima que aproximadamente 8,000 cuerpos yacen bajo los escombros.

La situación humanitaria en Gaza se ha agravado, con más de 90 civiles gazatíes muertos y decenas heridos en bombardeos israelíes recientes, especialmente en el centro del enclave, según la agencia palestina Wafa.

El gobierno gazatí denuncia la obstrucción de la ocupación israelí a las labores de rescate, impidiendo el acceso de ambulancias y personal de Defensa Civil a las víctimas atrapadas.

En paralelo, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) inició audiencias sobre las «consecuencias legales» de las políticas de Israel en los Territorios Palestinos Ocupados, un proceso al que el Gobierno israelí ha optado por no participar.

El ministro de Exteriores palestino, Riad al Maliki, destacó la gravedad de la situación, indicando que «2.3 millones de palestinos en Gaza, la mitad de ellos niños, están siendo cercados y bombardeados, muriendo y resultando heridos, muriendo de hambre y siendo desplazados».

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