El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha asegurado que su gobierno está preparado para retomar una ofensiva militar en el Líbano si el grupo proiraní Hezbolá infringe de manera significativa las condiciones de la tregua recientemente establecida.

Aunque el acuerdo de alto el fuego está vigente, Netanyahu no descarta una «guerra intensiva» en caso de violaciones importantes.

En una entrevista con un medio israelí citada por la agencia de noticias EFE, el mandatario hizo hincapié en que las Fuerzas de Defensa de Israel están listas para actuar si es necesario, y que las medidas a tomar no se limitarían a operaciones quirúrgicas como las realizadas hasta ahora.

Entrevista

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— Benjamin Netanyahu – בנימין נתניהו (@netanyahu) November 28, 2024

El pacto de alto el fuego, mediado por Estados Unidos y Francia, estipula un cese de hostilidades por dos meses, durante los cuales Hezbolá deberá retirarse al norte del río Litani y las tropas israelíes se replegarán del territorio libanés.

Sin embargo, ambas partes tienen divergencias en cuanto al alcance del acuerdo, especialmente en lo que respecta a los ataques preventivos de Israel en caso de sospechas de violación.

El gobierno libanés, liderado por Najib Mikati, ha advertido que cualquier acción militar israelí constituye una violación de su soberanía y ha pedido a la comunidad internacional, incluyendo al presidente francés Emmanuel Macron, presionar a Israel para evitar infracciones al alto el fuego.

En los últimos días, el ejército israelí ha llevado a cabo ataques contra objetivos vinculados a Hezbolá, incluyendo depósitos de armas y posiciones desde donde presuntamente se habrían lanzado proyectiles durante el mes anterior.

Tanto Hezbolá como el gobierno libanés han negado estas acusaciones y han calificado las incursiones como una amenaza al frágil acuerdo de paz.

Benjamín Netanyahu ha dejado claro que el alto el fuego podría ser corto y que Israel mantendrá su derecho a defenderse, respaldado por Estados Unidos.

Mientras tanto, miles de desplazados en el norte de Israel aguardan poder regresar a sus hogares, aunque muchos dudan de la posibilidad de una paz duradera.

Con la tregua en un equilibrio delicado, las acciones de ambas partes serán determinantes en los próximos días.

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