Un trágico hecho sacudió al país de Estados Unidos cuando un niño de siete años murió tras ser atacado por una jauría de perros en Shoshone-Bannock, en Idaho.

De acuerdo a los informes, lo atacaron dos rottweilers y dos perros mestizos en la propiedad de sus dueños; la madre intentó salvarlo al tirarse encima, pero también resultó agredida; está internada y en estado grave.

Ante ello una vecina alertó a la policía, quienes llegaron con los servicios de emergencia y los trasladaron al hospital.

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Posteriormente, las autoridades informaron que el niño de siete años murió cuando ingresaba al centro de salud, en cambio su mamá logró salvarse.

Asimismo, fuentes policiales detallaron que los perros eran de los vecinos, sin embargo estos no se encontraban en casa y tras el ataque los citaron por 15 violaciones de la Ordenanza de Animales de las Tribus. 

Finalmente, los cargos de los que se les acusa son de ataque de animal, de no tener a los perros vacunados contra la rabia y de no contar con las licencias pertinentes para tener cuatro animales de ese tipo en casa; los cuatro perros resultaron sacrificados.

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