Bajo una operación llamada Smoke Jumpers, autoridades de Estados Unidos lograron incautar más de 680 mil píldoras de fentanilo. Según información proporcionada por la embajada estadounidense en México, las píldoras fueron introducidas en extintores de incendios y estaban ocultas en cargamentos de chatarra por una organización de narcotráfico.

Las autoridades realizaron un total de 13 incautaciones, logrando interrumpir el tráfico de drogas entre México y Estados Unidos. Además de las píldoras de fentanilo, se decomisaron 10 mil 418 píldoras de metanfetaminas, tres kilogramos de fentanilo en polvo y 17 kilogramos de heroína.

En el marco de esta operación, el Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó a 17 personas por su participación en el tráfico de fentanilo y otras drogas a través de la frontera compartida.

Los acusados detenidos fueron identificados como Oscar Ahumada Leyva, Miguel Antonio Rabago Valenzuela, Gustavo Rivero Rodríguez, Carlos Espinoza, Erick Roque Ángeles y otros más. Seis de los acusados quedaron bajo custodia en Los Ángeles e Inland Empire. Cinco de ellos han sido imputados formalmente, se declararon no culpables y esperan vinculación a juicio el 2 de abril.

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