Al irrumpir su acto sexual, padres matan a su bebé por exceso de llanto. El hecho consternó a gran parte de la sociedad.

Con golpes en diferentes partes del cuerpo, costillas fracturadas y señales de asfixia murió el bebé a manos de su padre y madre, confirmaron las autoridades.

Luke y Emma fueron condenados a ocho y cinco años de prisión, por el asesinato de su hijo de tal solo dos meses de edad.

Estos hechos sucedieron en Burntwood (Inglaterra), en el 2014, cuando esta pareja se encontraba teniendo relaciones sexuales.

En un momento determinado el pequeño Tyler comenzó a llorar y Luke acudió a su habitación para verlo.

Al no dejar de llorar el bebé, el hombre lo arrojó contra el suelo hasta que dejó de llorar, posteriormente lo colocó en su cama y regresó al acto sexual.

Posteriormente al acto sexual los padres vieron que el bebé estaba inconsciente por lo que llamaron al número de emergencias.

Los paramédicos observaron los distintos golpes e incluso una fuerte mordida en el antebrazo, pues el bebé murió una hora después. La razón fue por exceso de llanto.

En junio de ese año se dictó la condena de 8 y 5 años de prisión a los padres de este pequeño.

A pesar de lo sucedido los abuelos del bebé consideran que es bueno que se haya hecho justicia.

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