Pemex incorpora el cambio climático a sus riesgos financieros
12/07/2024 - Hace 6 meses en MéxicoPemex incorpora el cambio climático a sus riesgos financieros
CDMX.- La estatal petrolera mexicana, Pemex, ha tomado una decisión transcendental al incluir los riesgos asociados al cambio climático en su lista de riesgos financieros. Esta medida se suma a otros 10 riesgos estratégicos que la compañía ya tenía listados, como el robo de hidrocarburos, el refinanciamiento de pasivos y la restitución de reservas de petróleo y gas.
Hasta el momento, Pemex no se había pronunciado sobre los posibles impactos que el cambio climático podría tener en sus operaciones. Sin embargo, recientemente ha publicado un documento en el que reconoce que el aumento en la temperatura del planeta podría generar un «deterioro de su viabilidad financiera, de su reputación y de la seguridad de sus operaciones«.
La gestión adecuada de estos nuevos riesgos se ha vuelto fundamental para la estatal, ya que el incumplimiento en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y el deterioro de sus activos podrían tener consecuencias económicas significativas. Este nuevo enfoque en la inclusión del impacto climático en su gestión de riesgos surge en un momento en el que la compañía enfrenta importantes desafíos crediticios.
Agencias calificadoras como Moody’s han rebajado la calificación crediticia de Pemex debido a su falta de acciones para reducir su exposición a riesgos ambientales, sociales y de gobernanza. Estas agencias han evaluado negativamente a la empresa y la han colocado en una posición vulnerable en términos de sostenibilidad financiera.
Pemex expresa preocupación sobre el cambio climático
En su documento, Pemex ha enumerado una serie de previsiones sobre cómo el cambio climático podría afectar sus operaciones, incluyendo riesgos físicos como tormentas, escasez de agua, huracanes y sequías. La empresa ha reconocido la necesidad de priorizar la atención a estos riesgos climáticos para proteger sus activos, evitar interrupciones en la producción y garantizar la continuidad operativa.
Además de los riesgos físicos, Pemex también considera posibles cambios en las regulaciones, avances tecnológicos y modificaciones en las preferencias del mercado como factores que podrían impactar negativamente en sus operaciones. La empresa entiende que la transición hacia una economía descarbonizada plantea desafíos importantes que deben abordarse de manera urgente.
En este contexto, Pemex se ha fijado metas ambiciosas para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar su desempeño ambiental. La compañía se ha comprometido a ser una empresa cero emisiones para el año 2050 y a reducir en un 90% las emisiones de dióxido de azufre en sus centros procesadores de gas para el 2030.
