El plan de la localidad de Tangerhütte, en el este de Alemania, de quitar el nombre de Ana Frank a una guardería han desatado una ola de protestas en el país. Organizaciones como el Comité Auschwitz o la Sociedad Germano Israelí se han sumado a esta protesta.

En un comunicado emitido este lunes, las autoridades de la ciudad aclararon que, por el momento, la decisión de renombrar la guardería no está en el orden del día. Explicaron que la idea forma parte de una serie de cambios que están planeados y que se querían ilustrar con un nuevo nombre.

Sin embargo, esta propuesta ha generado críticas y preocupación entre diversas organizaciones. El presidente de la Sociedad Germano-Israelí de Magdeburgo, Tobias Krull, afirmó que un cambio de nombre sería una señal equivocada en momentos de creciente antisemitismo.

Por su parte, Christoph Heubner, presidente del Comité Auschwitz, escribió una carta abierta dirigida a la ciudad en la que expresaba su preocupación. Afirmó que retirar el nombre de Ana Frank solo causaría temores en relación al futuro de la cultura del recuerdo.

La directora de la guardería manifestó que la historia de Ana Frank como joven judía víctima del Holocausto era difícil de transmitir a los niños. Ante esto, el alcalde de la ciudad, Andreas Bröhm, argumentó que si los padres y empleados querían otro nombre, debía ser considerado más importante que las consideraciones políticas.

Buscan cambiar nombre de Ana Frank por «Weltendecker»

Un diario regional indicó que se había decidido cambiar el nombre de Ana Frank por «Weltendecker» (Descubridores del Mundo). Sin embargo, Bröhm aclaró que las discusiones sobre el cambio de nombre están en curso y que no se ha tomado una decisión inminente.

El alcalde también aseguró que esta discusión no tiene relación con la situación en Medio Oriente y que se inició a principios de año.

Ana Frank, nacida en Frankfurt, en el centro de Alemania, pertenecía a una familia judía. En 1933, debido a la llegada al poder de los nazis, la familia huyó a Holanda. Tras la invasión alemana, se escondieron durante dos años, de 1942 a 1944.

Durante ese tiempo, Ana Frank escribió un diario que se convirtió en uno de los libros más leídos en el mundo. Trágicamente, Ana Frank murió en 1945 en el campo de exterminio de Bergen-Belsen, mientras que su padre sobrevivió al Holocausto y publicó su diario después de la guerra.