El pasado 21 de julio la policía detuvo por casualidad a un hombre que asesinó a un niño hace 33 años, los hechos ocurrieron en Nuevo México, Estados Unidos.

De acuerdo con la información que se dio a conocer el homicida identificado como James Michael Coates, se encontraba como pasajero en un Uber.

Sin embargo, en una parada de tráfico el conductor del vehículo fue detenido por la Policía de Roswell. Tras realizarse el proceso en el que se incluían muestras de ADN, se descubrió que era el asesino de un niño.

El niño de ocho años desapareció en 1998, luego de que no regresó a su casa a cenar. Al trascurso de 48 horas encontraron su cuerpo cerca de su domicilio en Atlanta. En aquel momento Coates vivía en la misma zona que la víctima.

En febrero del año en curso la familia del niño dio permiso para que el cuerpo fuera exhumado y encontrar más pruebas del delito. Fue entonces que se realizaron pruebas de ADN de las evidencias y se vinculó a Coates con el crimen.

Finalmente, luego de 33 años del crimen el hombre fue detenido y acusado de los delitos de asesinato y abuso sexual infantil agravado.

También te puede interesar: Mujer denuncia a sus hermanos y padre adoptivos por abusar de ella