En un acto electoral celebrado en Coquitlam, el primer ministro canadiense, Mark Carney, lanzó fuertes críticas hacia el presidente estadounidense, Donald Trump, acusándolo de utilizar la guerra comercial para desestabilizar a Canadá y ejercer control sobre el país.

Carney afirmó que las recientes declaraciones de Trump, quien expresó su interés en anexionar a Canadá, subrayan la importancia de las elecciones federales que se avecinan en el país.

El primer ministro enfatizó la necesidad de que los canadienses elijan a un líder capaz de desafiar las políticas de Trump y fortalecer la soberanía económica de Canadá. Esta elección, según él, será crucial para enfrentar las imposiciones arancelarias que han lastimado diversos sectores de la economía canadiense.

El impacto de esta guerra comercial es significativo, con el Fondo Monetario Internacional ajustando a la baja las previsiones de crecimiento económico de Canadá. Además, los aranceles han llevado a represalias, aumentando las tensiones entre los dos países socios del tratado T-MEC.

Ante esta situación, tanto Carney como su principal opositor, el conservador Pierre Poilievre, han prometido medidas para reducir la dependencia económica de Estados Unidos y diversificar las exportaciones canadienses.

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