La Organización de las Naciones Unidas (ONU), propone que los países adopten un ingreso básico temporal a los más pobres y vulnerables, lo que permitiría a casi tres mil millones de personas quedarse en casa en por lo menos 132 países.

Esta medida ayudaría a frenar la transmisión del Coronavirus y su evolución en los distintos países, sobre todo en aquellos donde hay una cantidad considerable de personas en pobreza y pobreza extrema.

El propósito, de acuerdo al programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), es que esos recursos permitan a la población de los países en vías de desarrollo, cumplir cuarentenas y medidas de distanciamiento social necesarias para contener una pandemia que no deja de avanzar.

Se calcula que el programa costaría a partir de unos 199 mil millones de dólares al mes para facilitar el ingreso básico a dos mil 700 millones de personas.

Y es que uno de los factores por lo que la COVID-19 sigue cobrando terreno, es el hecho de que muchos trabajadores están obligados a continuar sus actividades para poder sobrevivir.

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