Kazán.- En medio de la creciente escalada de tensiones en Oriente Medio, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha lanzado una advertencia contundente, asegurando que la región está «al borde de una guerra total». Las declaraciones de Putin tuvieron lugar durante la cumbre de los países BRICS celebrada en Kazán, donde líderes de todo el mundo se reunieron para discutir temas de importancia global.

Según Putin, los combates se han extendido a Líbano y otros países de la región se ven afectados por el aumento del nivel de confrontación entre Israel e Irán. Esta situación, en palabras del líder ruso, parece ser una reacción en cadena que podría desembocar en una guerra a gran escala en Oriente Medio. En este contexto, Putin hizo un llamado urgente a poner fin a la violencia y brindar asistencia vital a las víctimas de los conflictos en la región.

Además, el presidente ruso abogó por la creación de un Estado palestino independiente que pueda coexistir pacíficamente con Israel. Esta postura de Putin llama la atención dado el papel históricamente cercano de Rusia a Israel, aunque en los últimos meses ha fortalecido sus relaciones con Irán, a pesar de las acusaciones de suministro de armas por parte de los países occidentales.

En este contexto de tensiones en Oriente Medio, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, también hizo un llamado a la paz durante la cumbre de los países BRICS. Guterres pidió una «paz justa» en Ucrania y el cese inmediato de las hostilidades en Gaza y Líbano, especialmente en medio de las tensiones entre Israel y el movimiento Hezbolá.

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