Un tribunal del estado de Georgia ha tomado la decisión de descalificar a la fiscal de distrito encargada de procesar al magnate republicano por delitos electorales, pero ha rechazado la petición del presidente electo de desestimar por completo el caso en su contra.

La fiscal de distrito del condado de Fulton, Fani Willis, ha sido apartada del caso por el Tribunal de Apelaciones de Georgia debido a una relación íntima que mantenía con el fiscal especial encargado del asunto.

Esta decisión se basa en la «incorrección» de dicha relación, dejando en entredicho la integridad del proceso judicial.

Tras meses de estancamiento, el caso contra Trump por asociación delictiva en los intentos de alterar los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en Georgia ha tomado un nuevo giro.

A pesar de la descalificación de la fiscal Willis, el tribunal ha rechazado la solicitud del expresidente de desestimar la acusación en su contra. Esta decisión coloca a Trump en una situación complicada, ya que este caso en Georgia es el único proceso penal que enfrenta actualmente mientras se prepara para regresar a la Casa Blanca el 20 de enero.

A pesar de la política del Departamento de Justicia de no procesar a un presidente en funciones, este caso podría tener implicaciones significativas en el futuro político de Trump.

Willis tiene la posibilidad de apelar su descalificación ante la Corte Suprema de Georgia, mientras que el expresidente enfrenta un escenario incierto en su camino de regreso al poder.

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