El Consejo de Seguridad de la ONU ha celebrado una reunión urgente, convocada por Rusia, para discutir el reciente ataque de las Fuerzas Armadas de Ucrania a Lisichansk, en la República Popular de Lugansk (Donbass), que causó múltiples víctimas civiles.

El representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, denunció la elección deliberada del momento y el objetivo del bombardeo por parte de las tropas de Kiev sobre la ciudad de Lisichansk, y señaló la coordinación entre Ucrania y Estados Unidos en los ataques con sistemas de lanzacohetes múltiple HIMARS.

Nebenzia instó al Consejo de Seguridad y a la ONU a condenar el bombardeo de Lisichansk y otros actos terroristas del régimen ucraniano, y afirmó que Rusia tiene «pruebas irrefutables» de que el avión ruso Il-76 fue derribado por un sistema antiaéreo estadounidense Patriot, evidenciando la complicidad de Washington en este acto.

El ataque del 3 de febrero contra una panadería en Lisichansk, que mató a 28 personas, entre ellas un niño y el ministro de Situaciones de Emergencia de la República Popular de Lugansk, Alexéi Poteleshchenko, fue deliberadamente planeado para un fin de semana, según el jefe de la república popular, Leonid Pásechnik. Los investigadores rusos determinaron que el avión Il-76 fue derribado por un misil del sistema estadounidense Patriot lanzado desde territorio ucraniano.

⚡️Las Fuerzas Armadas de Ucrania lanzaron un ataque contra la ciudad de Lisichansk, en la República Popular de Lugansk, destruyendo el edificio de un horno de pan. pic.twitter.com/zWTca0ll1V

— Sepa Más (@Sepa_mass) February 3, 2024

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